Pronostican un ajuste severo para la Argentina

Eleconomista.com.ar – La crisis financiera global no tiene precedentes históricos. Pero la de la Argentina pareciera que si. Al menos muchos creen que el país va rumbo a la primera recesión luego de la crisis de 2002. El economista del Citi, Alberto Ades, asegura que la economía el año que viene no crecerá. Y con suerte. Es que contempla la posibilidad que haya una recesión del 5%, una dura caída si se tiene en cuenta que sería la mitad de la magnitud que la que ocurrió en 2002. Las estimaciones del Citi fueron repartidas en un seminario organizado por FIEL en Buenos Aires donde también hablaron otros analistas. En general los economistas tienen una visión pesimista sobre la evolución de las principales variables de la economía en 2009. Y vislumbran tres ajustes para el año que viene en distintas áreas.
En el plano social, habrá un aumento del desempleo. Para Fernando Navajas de FIEL esa variable hoy avanza hacia el 10%. El Gobierno parece notar ello y se encuentra trabajando sobre medidas que puedan evitar despidos por parte de las empresas en los próximos meses. En el plano monetario, el Banco Central perdería una significativa cantidad de divisas. En el seminario, Gustavo Cañonero de Deustche Bank, pronosticó que el país perderá U$S 11.000 millones de reservas entre 2008 y 2009. De esta forma estima que a fin de al año próximo la Argentina contará con U$S 35.000 millones de reservas. Si la caída de las commodities persiste entonces podrían llegar a U$S 28.500 millones.
Pero es en el plano fiscal donde se presenta el ajuste más brutal. En los papeles la economía enfrentará una desaceleración con un superávit fiscal presupuestado de 3,2%. Esto es todo lo contrario a lo que recomiendan las recetas keynesianas de gastar más en épocas de crisis. De esta forma, y como a fines de los noventa, el país recurre a la ortodoxia fiscal en un contexto recesivo. Para Miguel Kiguel, economista de Ecoviews, el tamaño del déficit fiscal necesario para revertir la caída de la economía debería ser entre 2 y 3 puntos del PIB.
El problema es que el país no tiene ese monte de dinero para hacerse ni puedo conseguirlo. “El año que viene va a ser difícil no solamente porque la economía caiga en sí, sino además porque no hay instrumentos para salir de la crisis”. Una de las alternativas que se escucha por estos días de boca de los analistas es que el país gestione un préstamo al Fondo Monetario. ¿Pero cuánto podría prestar el organismo? En teoría cerca de U$S 15.600 millones, algo así como 5 puntos del producto. El organismo desembolsa de manera fácil cinco veces la cuota de un país. Esto quiere decir que no hacen falta grandes condicionalidades en el contexto de hoy. Aunque sí arreglar ciertas cuestiones como el INDEC.