Aumentan las facturas de luz y gas para un millón de usuarios
A partir de agosto, los grandes consumidores vuelven a pagar un 30% de los cargos tarifarios.
La Nación – El Gobierno confirmó ayer que, desde el domingo, más de un millón de hogares verán reducido el nivel de subsidios con que el Estado mantiene congeladas las tarifas de gas y electricidad.
Así, los grandes consumidores pagarán un precio más caro que hoy (entre 20 y 100%, según la zona y el nivel de consumo) por cada kilovatio o metro cúbico de gas que figure en sus facturas. Tal como ocurrió el año pasado, en los meses de junio y julio el Gobierno cubrió con subsidios la suspensión de los aumentos en el costo de la energía que había sido dispuesta en 2008. Y, por segundo año consecutivo, en agosto y septiembre esos subsidios serán reducidos en un 30 por ciento. A partir de octubre se volverá a pagar la tarifa plena.
En la práctica, las tarifas que pagarán los grandes usuarios residenciales por sus consumos de agosto serán más caras que las que correspondieron a junio y julio, pero más baratas que las que abonaron por los ocho meses previos al invierno.
Según datos del Ministerio de Planificación, en el caso de la electricidad, la reducción del subsidio alcanza al 10% de los 11 millones de clientes residenciales de todo el país. Son aquellos que consumen más de 1000 kW por bimestre. Los aumentos son progresivos y pueden llegar a más del 300% para los consumidores de más de 2800 kW a partir de octubre (cuando los subsidios serán totalmente eliminados). En agosto y septiembre el alza equivale a un tercio de ese porcentaje.
Para el caso del gas, el cambio tarifario opera en los consumidores enrolados en las categorías R 3-3 y R 3-4 (equivalentes a un consumo de más de 1500 metros cúbicos anuales en la zona de Capital Federal y Gran Buenos Aires). Según la cartera que comanda De Vido, en esas categorías están comprendidos un 15% de los 7 millones de clientes residenciales. De todos modos, aun con la eliminación parcial de los subsidios, los grandes consumidores de gas en red seguirán pagando menos que los 4 millones de hogares que tienen que calentarse con gas en garrafas.
El diario Clarín recordó ayer en su portada que desde el domingo vuelven a regir tarifas más altas para una franja de la población. Ante esta situación, el Ministerio de Planificación emitió un comunicado en el que informa que "dichos ajustes corresponden a la misma quita parcial de subsidios para los usuarios de mayores consumos que se aplicó en 2009 durante los meses de agosto y septiembre".
El texto destaca que en 2008 "comenzó a aplicarse una quita progresiva de subsidios para los sectores de mayores consumos, con excepciones para jubilados, desocupados y electrodependientes, que incluyó la elaboración de un padrón de excluidos tanto para el gas como para la electricidad. En 2009, por la mayor demanda residencial, producto de las bajas temperaturas, se restituyó durante los meses de junio y julio el 100 por ciento del subsidio a los hogares de mayor consumo para evitar las distorsiones que podía producir el uso intensivo de calefacciones, tanto eléctricas como a gas".
Por su parte, la Defensoría del Pueblo de la Nación, a cargo de Anselmo Sella, reiteró que "continúa vigente" la resolución judicial del 10 de septiembre de 2009, que "permite que los usuarios afectados por el cargo tarifario puedan abonar las facturas excluyendo el mismo". Las empresas distribuidoras no podrán suspender el servicio a quienes paguen la factura sin el aumento dispuesto en 2008.
Ahorro estatal
Aquellos cargos tarifarios habían sido instrumentados por el Gobierno como forma de reducir los subsidios que se destinan a la importación de gas de Bolivia, a la operación del buque regasificador en Bahía Blanca y a los mayores costos de la generación y la importación de electricidad. Para el año pasado, el Gobierno estimaba ahorrar más de 800 millones de pesos por el incremento tarifario, aunque la suspensión de su aplicación en los meses de invierno significó un recorte en el ahorro de casi 500 millones.
"Ojalá hubiera un aumento, pero la verdad es que no lo hay", reaccionaron ayer en una de las empresas del sector gasífero. Todo lo que ingresa de más se destina a las arcas estatales, aunque las distribuidoras funcionan como agentes de cobro.
En otra compañía destacaron que el año pasado hubo muchas quejas de gente que quedaba encuadrada entre los grandes consumidores, pero que no respondía al perfil de alto poder adquisitivo. Sin embargo, luego de que se instrumentaron las excepciones hubo una depuración del padrón. "Como el padrón de excluidos funciona muy bien desde hace un año, aquel que de verdad no puede no está pagando el aumento", señalaron en el sector de electricidad.
Un funcionario cercano a De Vido dijo que el Gobierno no prevé que se produzcan protestas cuando lleguen las facturas. "En electricidad ya llevamos dos veranos con la tarifa sin subsidios y en el último verano no hubo problemas. Se perfeccionó mucho el tema de las excepciones y hoy tenemos un relevamiento bastante amplio", dijo la fuente, que anticipó que el invierno próximo seguramente se volverá a producir la aplicación de subsidios para reducir las tarifas por dos bimestres (100% de subsidios en junio y julio, y 70% en agosto y septiembre).
