Se normaliza la recolección de basura tras un acuerdo gremial

Lanación.com.ar – La recolección de residuos comenzaba a regularizarse anoche, después de que el gobierno porteño y el sindicato de camioneros arribaran a un principio de acuerdo con respecto a los reclamos de los trabajadores, que la noche anterior habían operado a reglamento, con la consecuencia de que la ciudad amaneciera virtualmente convertida en un basural.

Al cierre de esta edición, el secretario de Recolección del gremio, Marcelo Aparicio, dijo a LA NACION que la medida de fuerza había sido levantada y que los trabajadores se "esforzarían" para que, por la mañana no quedaran rastros de bolsas en las veredas, como en la víspera. Poco antes, el ministro de Ambiente y Espacio Público, Juan Pablo Piccardo, había confirmado a este diario que la recolección estaba garantizada, aun cuando las negociaciones con los gremialistas no están cerradas aún, sino que continuarán durante las próximas semanas. Durante ese tiempo, dijeron ambos, el servicio se cumpliría en las condiciones habituales.

Antes de esta resolución, de la que participó directamente el líder del sindicato de camioneros, Pablo Moyano, el gremio había advertido que profundizaría las medidas de fuerza y amenazó con realizar una marcha a la jefatura del gobierno si no obtenía respuestas a su reclamo del pago del aumento salarial acordado en paritarias. El aumento acordado era del 17%; se pagaría el 7% en agosto, el 5% en septiembre y el resto, en octubre.

El conflicto y la intempestiva medida de fuerza habían hecho que la ciudad amaneciera repleta de bolsas en las veredas. Durante el día, la lluvia complicó el panorama, pues algunos sumideros se taparon con los residuos. La basura se amontonó, sobre todo en las avenidas, ya que los edificios que se sitúan sobre ellas son los que más residuos producen, según dijeron las fuentes. Balvanera y Congreso fueron algunas de las zonas más afectadas.

La medida implicó la recolección a pie, a paso normal, en lugar de corriendo, lo que demoró sensiblemente la tarea y dejó varias áreas sin completar, según dijo a LA NACION Aparicio.

"Se trabajó en la recolección de la basura a reglamento por falta de pago, porque no quieren reconocer aumentos y porque el mes que viene se esperan despidos. Por eso, los trabajadores están en plan de lucha", se indicó en un comunicado gremial. Aparicio añadió que "el 19 de septiembre vence el plazo [de vigencia de los contratos] de 5000 trabajadores que no saben si van a tener trabajo".

Piccardo, que se había quejado porque el gremio dispuso la medida de fuerza aun a sabiendas de que habría tormenta, sostuvo: "El servicio no es malo en términos de limpieza. De hecho, se ha mejorado sensiblemente la limpieza de la ciudad, pero es un sistema caro". Dijo: "La medida de fuerza se sustentó en una negociación que se está llevando adelante para reformular los sistemas de limpieza y recolección vigentes hoy en la ciudad".

En tanto, Pablo Moyano justificó la medida y explicó que se inscribe en el plan de lucha iniciado la semana anterior en Buenos Aires y extendido en las últimas jornadas a la Capital. El hijo del secretario general de la CGT explicó: "Las autoridades porteñas se propusieron reducir entre el 17 y el 25% el presupuesto en el servicio, lo que representa una gran cantidad de despidos en el sector".

Montañas de bolsas

En una recorrida por diferentes zonas de la ciudad, LA NACION comprobó que numerosas esquinas estaban atiborradas de basura. Las avenidas Rivadavia y Corrientes, en Once, estaban particularmente sucias. Y en Santiago del Estero e Hipólito Yrigoyen, Congreso, un montículo de basura impedía el paso por la vereda.

En Recoleta también hubo problemas; sobre todo en Guido y Ortiz, donde hay varios restaurantes.

Ante este panorama, el gobierno porteño organizó un operativo de emergencia. Tres camiones de recolección del Ente de Higiene Urbana recogieron residuos en las principales avenidas porteñas.

Legisladores de la oposición culparon al gobierno porteño del conflicto y criticaron a Mauricio Macri. Eduardo Epszteyn, jefe del bloque Diálogo por Buenos Aires, dijo: "La irresponsabilidad de no recolectar los residuos no es de los trabajadores: es el resultado de una pésima administración en el contrato de la basura [que fue prorrogado a la espera de una nueva licitación]".

Claves

• Licitación. Las concesiones a las empresas encargadas de la recolección terminaron en febrero y fueron prorrogadas. El Poder Ejecutivo envió los pliegos de una licitación a la Legislatura, donde recibieron modificaciones importantes y deberían ser aprobados antes de fin de año.

• Reclamo. El sindicato de Camioneros exigió ayer que se concrete el llamado a una nueva licitación para asegurar los 5000 puestos de trabajo por parte de las empresas recolectoras.

• Aumento salarial. Además, los trabajadores reclamaron el cumplimiento del esquema de aumento salarial aprobado, que suma el 17 por ciento en tres tandas de 7%, 5% y otro 5%.

• Tregua. Anoche se recolectaron los residuos, pero no se resolvió el problema de fondo.