Raúl se cargó a dos de Fidel
La reforma política tocó al canciller Felipe Pérez Roque y al secretario del Consejo de Ministros Carlos Lage, “delfines” del mayor de los Castro
CríticaDigital.com.ar – El presidente de Cuba, Raúl Castro, realizó ayer una profunda reestructuración de su gobierno, inédita por su magnitud, en la que eliminó a reconocidas figuras de la política de los últimos años, como el canciller Felipe Pérez Roque y el virtual primer ministro, Carlos Lage, al tiempo que promovió a más militares a las altas esferas del Gabinete.
La reforma gubernamental no es una sorpresa, ya que el propio Raúl Castro la había anunciado al asumir oficialmente la presidencia del país, el 24 de febrero de 2008, arguyendo la necesidad de una “estructura más compacta y funcional, con menor número de organismos de la administración central del Estado y una mejor distribución de las funciones que cumplen”, como recordó ayer la “nota oficial” en la que se dieron a conocer los cambios. Sí ha llamado la atención la salida de figuras habituales de la política cubana reciente, así como el incremento de miembros de las Fuerzas Armadas Revolucionarias, que Raúl Castro dirigió durante casi cinco décadas, en el gobierno.
Pérez Roque, de 43 años, fue considerado largo tiempo el “delfín” del ex presidente Fidel Castro, de quien llegó a convertirse en mano derecha hasta que, en 1999, asumió la cartera de Relaciones Exteriores de la que ahora ha sido “liberado” sin que se revele si tendrá un nuevo puesto en el gobierno. Será sustituido como jefe de la diplomacia de la isla por Bruno Rodríguez Parrilla, su hasta ahora número dos, en momentos en que el país acomete una fuerte ofensiva diplomática, con la mejora de relaciones en América Latina, Europa y Asia.
La “nota oficial” leída ayer en el informativo de la televisión indica, además, la decisión de “liberar al compañero” Lage de su cargo de secretario del Consejo de Ministros. Será sustituido por el general de brigada José Amado Ricardo Guerra, “con la función de asistir y auxiliar al presidente del Consejo de Ministros, al primer vicepresidente y demás miembros de su Comité Ejecutivo”. Aunque este cargo era conocido extraoficialmente como el de primer ministro, la “nota” especifica que “no constituye legalmente una instancia con facultades de decisión en materia gubernamental, ni se le atribuye protagonismo alguno en la dirección del gobierno”. Lage, considerado otro de los hombres próximos a Fidel y defensor de una moderada apertura económica en la isla, fue barajado como “presidenciable” en la quiniela que el año pasado precedió a la elección de Raúl Castro, y al igual que Pérez Roque, mantiene sin embargo su puesto como vicepresidente del Consejo de Estado.
La profunda reforma gubernamental anunciada ayer incluye la fusión de cuatro ministerios en dos carteras, la del nuevo Ministerio de Comercio Exterior e Inversión Extranjera, que estará a cargo de Rodrigo Malmierca, y la del Ministerio de Industria Alimenticia, que asumirá María del Carmen González. En total, son 11 los ministros sustituidos o desplazados a nuevos puestos, incluido el de Economía y Planificación, José Luis Rodríguez García, quien será sustituido por Marino Murillo Jorge tanto en este puesto como en el de vicepresidente del Consejo de Ministros.
