Ratifican a Palacios como jefe policial

LaNación.com.ar – El jefe de gabinete del gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, ratificó ayer ante la Legislatura la designación como jefe de la Policía Metropolitana del cuestionado comisario retirado de la Policía Federal, Jorge Palacios, alias "Fino".

Lo hizo cuando promediaba la presentación semestral del balance de gestión ante el Poder Legislativo local, que duró seis horas, en respuesta a las fuertes críticas que volvió a recibir de todo el arco político opositor y de una veintena de jóvenes identificados con carteles de la agrupación Libres del Sur, cuyo líder es Humberto Tumini, que desde las tribunas elevaron gritos y cantos en contra de Palacios.

"Estamos convencidos de que Palacios va a ser el primero en velar por la seguridad de los porteños. Fue el policía más condecorado. Su experiencia es inigualable", arrancó con su defensa Rodríguez Larreta. Luego, reveló un dato que, hasta ahora, el gobierno porteño sólo había hecho trascender extraoficialmente: que autoridades actuales y precedentes de las entidades judías AMIA y DAIA expresaron su consenso al nombramiento, durante una reunión que mantuvieron semanas atrás con Mauricio Macri.

Rodríguez Larreta recordó un argumento esgrimido ante la Comisión de Seguridad de la Legislatura por la ombudsman porteña, Alicia Pierini. "El principio fundamental de los derechos humanos es el de inocencia, o sea, que nadie es culpable hasta que se demuestre lo contrario, nos guste o no la persona. Aprovecho que está presente la presidenta del Inadi [María José Lubertino, diputada electa por el kirchnerismo] para que no se cometa con Palacios un acto de discriminación, ya que no existe impedimento legal para su asunción. Nosotros convocamos al diálogo, pero también pedimos que se respete nuestra decisión. El jefe de gobierno tiene la potestad de nombrar al jefe de policía", sostuvo Rodríguez Larreta.

Como se recordará, Palacios enfrenta una causa en la justicia federal por presunto encubrimiento del atentado contra la AMIA, sin que su situación procesal se haya resuelto aún. La normativa vigente sólo impide que personas condenadas por la justicia ocupen cargos públicos.

Convocatoria

Al hablar de la convocatoria al diálogo con las fuerzas políticas, el jefe de gabinete hizo referencia al llamado que efectuó al comenzar su alocución.

En sintonía con la modalidad iniciada por el gobierno nacional -aunque "sin haber perdido un proceso electoral y sin nunca haber tenido mayoría legislativa", aclaró el diputado oficialista Alvaro González-, Rodríguez Larreta invitó a la oposición, a sectores empresariales, académicos y civiles, y a organizaciones sociales, a "fortalecer e institucionalizar el diálogo, en un ámbito que no esté condicionado por las urgencias de la coyuntura, para discutir temas estructurales para el desarrolo de la ciudad".

En esa línea, mencionó la situación social ("los más humildes son nuestra prioridad", dijo), la sustentabilidad económica (mediante mecanismos de financiamiento de largo plazo para obras adeudadas hace décadas), el perfil productivo de Buenos Aires (habló de promover el turismo, las industrias culturales y del conocimiento), y la reforma política (un código electoral local, la ley de partidos políticos, la ley de financiamiento de campañas electorales y la boleta única).

Referentes de la oposición celebraron la convocatoria al diálogo, pero coincidieron en exigir que el nombramiento de Palacios también sea revisado en la ronda de diálogo, lo que derivó en la respuesta de Rodríguez Larreta.

Además, la Coalición Cívica, el kirchnerismo, el ibarrismo, la centroizquierda y la izquierda advirtieron que "el comienzo del diálogo debe ser la verdad". Descreyeron de las cifras brindadas por Rodríguez Larreta sobre la situación financiera de la ciudad y la ejecución presupuestaria en segmentos clave como salud, educación y desarrollo social (como se informa por separado).