Presión opositora por la crisis en el Servicio Penitenciario Federal

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Los radicales Sanz y Morales sumaron un proyecto. Duras críticas.

Clarín – Cuenta Ernesto Sanz, titular del Comité Nacional de la UCR, que en su reciente recorrida por el Norte del país se encontró con un panorama desolador en torno al Servicio Penitenciario Federal. “Nos reunimos con jueces federales que nos dijeron que no sabían a dónde enviar a los presos porque el Penal de Güemes, en Salta, estaba colapsado”, detalló. Al regresar de su viaje, el mendocino presentó –junto a su correligionario Gerardo Morales– un proyecto en el Senado para instar al Gobierno a tomar “las medidas necesarias para hacer frente a la crisis carcelaria”. Pero el hacinamiento no es el único aspecto del SPF que preocupa al arco político opositor, que dispara diversos y variados cuestionamientos hacia la política penitenciaria del Gobierno e impulsa decenas de iniciativas en el Congreso.

Lejos de la polémica que generó en otros tiempos la figura de Víctor Hortel, con las licencias que tenía Vatayón Militante, los principales cuestionamientos no están orientados a la cúpula del SPF, encabezada por Emiliano Blanco, sino a la falta de inversión del Gobierno. “Podrán decir lo que quieran, como hacen siempre, pero esto yo lo vi en el lugar de los hechos: en el puesto de Gendarmería en Orán tienen gente detenida de forma permanente porque las cárceles federales están colapsadas y terminan siendo una escuela de delincuencia”, relató Sanz a Clarín. Al tiempo que advirtió que “el radicalismo, desde la Bicameral de control de los Organismos de Seguridad Interior, va a hacer un seguimiento exhaustivo para que las cosas cambien en el Servicio”.

La diputada de Unión PRO Patricia Bullrich, ex secretaria de Asuntos Penitenciarios e impulsora de diversos proyectos de ley sobre el sistema carcelario, coincidió con Sanz respecto al déficit en infraestructura, y cuestionó a Jorge Capitanich, quien en sus informes legislativos habló de la necesidad de “pensar en cárceles sanas y limpias, no para castigo sino para seguridad” de los internos. “Al jefe de Gabinete le preguntamos por qué en el Presupuesto de este año no se destinó una cifra seria para construir nuevos penales, pero no nos contestó. Evidentemente la decisión política es que no haya nuevas cárceles”, denunció la legisladora alineada con el macrismo.

Asimismo, Bullrich tildó de “obsoleto” al sistema penitenciario actual y aseguró que “hay que readecuarlo para que sea realmente un lugar para resocializar a quienes estuvieron al margen de la ley y que no vuelvan a delinquir: hoy el nivel de reincidencia es muy alto”.

Victoria Donda (Libres del Sur) también apunta en esa línea. “La reincidencia se explica en la incapacidad para reinsertar a las personas. Hay que cambiar el paradigma y tener un sistema de cuidado y resguardo en cumplimiento de la pena”, sostuvo la diputada, que impulsa varias iniciativas.

¿Cómo se puede mejorar respecto a la resocialización? La puntana Ivana Bianchi, de Compromiso Federal, considera “fundamental” que obligatoriamente los presos trabajen y estudien “para que cuando les toque salir tengan oportunidades”. Por eso, decidió plasmarlo en un proyecto de ley que, al igual que todos los presentados desde la oposición, no encontró eco en el oficialismo. Tampoco, afirma Bianchi, recibió respuesta a los pedidos de informes que elevó. “Veo con mucha preocupación el tema de la reincidencia, pero también es alarmante que hoy, desde las propias cárceles, se están cometiendo delitos, a través del uso de celulares. Y no se está haciendo mucho para controlar eso”, señaló. 

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