Oyarbide investiga si Ciro James trabajó en Boca
El juez pidió que informen si el ex policía de la Federal, acusado de espionaje, trabajó en el club y el Correo Argentino. Macri da una conferencia.
Crítica de la Argentina – El juez federal Norberto Oyarbide anunció este jueves que ordenará careos entre altos funcionarios del Gobierno porteño "para ver quién está mintiendo" y "oculta la verdad" en torno al supuesto espía de la comuna Ciro James, acusado de pinchar teléfonos.
El magistrado también adelantó, en declaraciones a los periodistas, que ordenará "obtener la información oficial" para "saber si es verdad" que James, antes de desempeñarse en el Gobierno porteño, trabajó en el club Boca Juniors y el Correo Argentino, cuando ambos eran dirigidos por Mauricio Macri.
"Se sostuvo en mi juzgado que (…) era intención del organizador de la Policía Metropolitana (comisario Jorge) Palacios llevarlo a James de Director General de esa fuerza", manifestó el juez.
Entonces el juez consideró que "están enturbiándose algunos caminos" en la investigación por los funcionarios porteños, pero advirtió que "hay herramientas pertinentes dentro del Código Procesal Penal como son los careos, que sirven para ver quién está mintiendo y quiere ocultar la verdad".
Seguidamente los periodistas le preguntaron si entre los careados figurarán los ministros de Justicia, Guillermo Montenegro; su subordinado y jefe de la Policía Metropolitana, Osvaldo Chamorro, y el ministro de Educación, Mariano Narodowski u otros altos funcionarios de la ciudad. Pero el juez no dio precisiones sobre a quiénes citará para los careos.
"Se ha sostenido periodísticamente que este señor Ciro James trabajó en Boca Juniors y en el Correo Argentino. Recién termino de ordenar a mi secretario (Gustavo Russo) para obtener esa información oficial y ver si eso es verdad", añadió.
También detalló que "ayer denegué el pedido de excarcelación" hecho por la defensa de James, que lleva dos semanas detenido, y reiteró que en breve resolverá la situación procesal del supuesto espía "pero todavía me quedan algunas horas por delante".
James fue oficial de la Policía Federal, donde habría trabajado bajo las órdenes del ex comisario Jorge "Fino" Palacios. Es el principal sospechoso sobre el presunto espionaje y trabajó hasta el 1º de octubre pasado en el Ministerio de Educación porteño.
El caso salió a la luz cuando el familiar de las víctimas de la AMIA Sergio Burstein denunció que fue alertado a través de una llamada anónima de que su teléfono estaba "pinchado" y que detrás de ello habría estado Palacios, por entonces organizador de la Policía Metropolitana y luego procesado por encubrimiento en el caso AMIA.
La intervención de los teléfonos de Burstein y del empresario Carlos Ávila, entre otros, fueron dispuestas por el juez Horacio Gallardo, de Misiones, en el marco de la causa por el homicidio del contador José María Piccoli, ocurrido en 2005 en Posadas, entre otros procesos penales.
Sindicatos de docentes y legisladores porteños denunciaron que el Ministerio de Educación porteño habría usado a James para espiar a directivos, maestros y alumnos de escuelas porteñas, durante el conflicto por la reducción de las becas, y elaborar presuntas "listas negras".
