En la Ciudad tampoco alcanzan los centros para tratar adicciones

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La legisladora Diana Maffía reveló que, así como ocurre en la Provincia de Buenos Aires, los hospitales porteños no tienen personal ni infraestructura para atender la demanda. \»El Estado no da respuestas a los adictos\», dijo a Criticadigital.

CriticaDigital.com.ar – El 80% de los Centros de Salud de la Ciudad (SeSAC) no atiende problemas de adicciones porque no cuenta ni con el personal ni con la infraestructura ni con los medicamentos necesarios para hacerlo. Lo mismo ocurre con los hospitales públicos, que deberían funcionar como centros ambulantes pero tampoco tienen recursos.

Así lo afirmó a Criticadigital la legisladora Diana Maffía (Coalición Cívica), quien le reclamó al Poder Ejecutivo porteño que garantice el derecho a la salud de niños, niñas y adolescentes adictos al paco, “asistiendo especialmente a aquellos que se radican en villas y asentamientos”.

Las adicciones -sobre todo entre los menores de edad que delinquen- es uno de los temas que más se vinculan a la inseguridad, cada vez que hay un robo u homicidio violento que conmueve a la sociedad. No obstante, el lunes pasado, Criticadigital advirtió que en la Provincia de Buenos Aires los 180 centros de asistencia también carecen de presupuesto y falta de profesionales que garanticen su funcionamiento.

En otras palabras, ni las unidades de atención sanitaria porteñas ni las bonaerenses están equipadas para dar respuesta a uno de los problemas que más se extiende entre los jóvenes y que más preocupa a la opinión pública.

Maffía explicó que en la Ciudad el presupuesto que se destina a la asistencia y reinserción de los adictos proviene del Ministerio de Desarrollo porteño y que sólo el 0,67% del presupuesto total de la cartera, se destina a la atención de los adictos.

“El Estado no brinda respuestas satisfactorias a una problemática preocupante –continuó-. Ejemplo de esto es la demora en que se encuentra la reglamentación de la Ley de Prevención y Asistencia del Consumo de sustancias psicoactivas y de otras prácticas de riesgo adictivo, sancionada en mayo de 2005.”

El gobierno porteño cuenta con dos instituciones –Casa Puerto y Casa Flores- para la recuperación de adictos: las opciones de tratamiento gratuito que ofrece la Ciudad se completan con la asistencia que brindan los hospitales públicos, las organizaciones convenidas y las becas que ofrece el SEDRONAR.

La legisladora de la CC afirmó que los efectores propios que tiene el gobierno porteño no alcanzan para cubrir las necesidades de la población, que los gabinetes de los hospitales públicos que deberían asistir a los adictos no funcionan por falta de recursos y que el ingreso a las unidades tercerizadas está plagado de escollos burocráticos que dificultan la inserción de los adictos.

“No siempre hay un seguimiento de los casos”, señaló Maffía y dijo que el sistema de derivación requiere de tantas entrevistas que no garantiza la internación del paciente, que siempre es voluntaria. “Estamos perdiendo la oportunidad de ayudar a la persona que quiere rescatarse y que muchas veces, se pierde en un laberinto de admisiones”, advirtió.

Si bien no hay números estadísticos que den cuenta de la cantidad de personas con problemas de adicciones que necesitan asistencia, afirmó que en los centros de atención “hay una lista de espera importante” y mencionó a los “chicos en situación de pasillo”, sobre los que informó Crítica de la Argentina el lunes pasado.

“Son chicos con problemas de adicción que viven en las calles de las villas y no llegaron a ninguna instancia de tratamiento: están en situación de calle al interior de las villas”, dijo Maffía y ratificó que las estimaciones más conservadoras, hablan de unos 600 niños y niñas en esa situación.

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