Uberti estuvo con Kirchner el día que se halló la valija
Lo admitió ante el juez, pero dijo que no habló de Antonini
LaNación.com.ar – Por Gabriel Sued. El ex funcionario kirchnerista Claudio Uberti reconoció ayer ante la Justicia que cuando la Aduana terminaba de contar los 800.000 dólares que acababa de secuestrarle a Guido Alejandro Antonini Wilson llamó a Néstor Kirchner y que esa misma mañana se reunió con él en la residencia de Olivos, tal como anticipó La Nacion. Pero aseguró que no hablaron del episodio de la valija, sino del viaje que él había hecho a Venezuela y de los acuerdos que ambos gobiernos firmarían dos días más tarde.
Uberti se presentó a declarar en forma espontánea ante el juez en lo penal económico Daniel Petrone, que le dio a la audiencia la forma de una indagatoria. Durante más de cinco horas, el ex funcionario hizo un descargo sobre las sospechas en su contra y respondió a las preguntas del magistrado y de la fiscal María Luz Rivas Diez, que lo acusa de ser cómplice de Antonini Wilson.
“Concurrí el sábado a informarle al presidente de la Nación sobre los avances obtenidos en el viaje que culminaron con la firma del convenio en oportunidad de la visita del presidente Chávez [Hugo]. Ese fue el motivo de mis llamadas a la quinta de Olivos, llamadas que tanto desde la quinta de Olivos o hacia donde se encontraba el Presidente eran habituales debido a mi función", dijo Uberti, ante la mirada del juez, de la fiscal y de su defensor, el abogado Diego Pirota.
La primera llamada a Olivos se registró a las 7.58 del 4 de agosto de 2007; la segunda, a las 8.33, y la tercera, a las 9.13. De acuerdo con testimonios de la causa, el conteo del dinero que se había decomisado a Antonini Wilson terminó alrededor de las 8. La reunión en la residencia presidencial se produjo, de acuerdo con la ubicación de las antenas que registraron llamadas de Uberti, alrededor de las 9.
En su declaración ante Petrone, el ex director del Organo de Control de Concesiones Viales (Occovi) reconoció que en esos días también había hablado por teléfono con Ricardo Echegaray, entonces director de la Aduana, el organismo que secuestró el dinero. Pero afirmó que tampoco con él había comentado el episodio de la valija. Aseguró que lo había contactado para consultarle cuestiones relativas a los acuerdos de exportación e importación que los presidentes Kirchner y Chávez firmaron el lunes 6.
Según dijo Uberti, la única autoridad del Gobierno a la que informó sobre el secuestro del dinero fue a su superior, el ministro de Planificación, Julio De Vido. "En su momento lo tomé como un problema que tuvo un pasajero con su equipaje, que luego tomó otras dimensiones que terminaron con mi renuncia el 9 de agosto", explicó.
Uberti fue uno de los pasajeros del avión privado en el que, a las 2.30 del 4 de agosto del año pasado, llegó Antonini al Aeroparque Jorge Newbery, proveniente de Caracas. En el vuelo, que había contratado la petrolera estatal argentina Enarsa, también viajaban el presidente de esta compañía, Exequiel Espinosa; la secretaria de Uberti, Victoria Bereziuk; tres funcionarios de Pdvsa, la petrolera del Estado de Venezuela, y Daniel Uzcátegui Specht, el hijo del vicepresidente de esta última firma, Diego Uzcátegui Matheus.
Con Antonini
Como había dicho por escrito el 1° de febrero, Uberti afirmó que él había autorizado que Antonini se subiera al avión, por pedido de Uzcátegui Matheus. Aseguró que había conocido al valijero en Caracas, el 3 de agosto, un día antes del viaje, en un almuerzo organizado por el vicepresidente de Pdvsa. Este último y su hijo fueron declarados rebeldes por el juez Petrone, que anteayer solicitó su captura. Como Uberti, ambos están acusados de ser cómplices de Antonini, en un posible caso de lavado de dinero. El valijero, también requerido por la justicia argentina, se recluyó en Miami, donde se abrió una causa en la que uno de los imputados dijo que los 800.000 dólares eran un aporte de Pdvsa a la campaña de Cristina Kirchner.
El ex funcionario kirchnerista aseveró ante Petrone que no tenía idea del origen ni del destino de la plata de la valija. Reconoció, como había trascendido, que luego del episodio del Aeroparque había hablado con Antonini "en más de una oportunidad".
En realidad, lo llamó durante los tres días que el valijero estuvo en el país. Pero dijo que siempre había sido en respuestas a "insistentes llamadas" de Antonini. "Intentó darme una explicación de lo sucedido […] y yo le dije que conmigo no tenía nada que hablar y que siguiera los trámites por los canales correspondientes", contó, sobre el primero de los contactos, producido el sábado 4, alrededor de las 9.
El acusado no supo decir cuál era el teléfono que usaba en ese entonces ni a nombre de quién estaba la línea: "Podrían estar asignados a uno de los concesionarios de los corredores viales por ser esto parte de los suministros en los contratos de concesión". Tampoco pudo corroborar o desmentir si, como declaró Bereziuk, Antonini había estado en la Casa Rosada, durante el acto del lunes 6.
Dijo no recordar, además, una aparente visita al Occovi, del 30 de mayo de 2007, de un tal Guillermo Antonini, que figura en un documento que figura en la causa. Nada le preguntaron sobre las llamadas que recibió de un celular asignado a Antonio Stiuso, director general de Operaciones de la SIDE.
La audiencia terminó con un incidente: la fiscal dijo que tenía otras obligaciones y que prefería continuar otro día. Uberti respondió que quería terminar de declarar y que estaba dispuesto a responder a todo. El juez dio por terminada la audiencia y debe definir si acepta la solicitud de la fiscal para citar de nuevo al acusado.
