La UCR busca el equilibrio entre Carrió y Cobos
El líder radical Gerardo Morales quiere sostener el Acuerdo Cívico y limitar al vicepresidente
LaNación.com.ar – Como un psicólogo que intenta mediar entre dos cónyuges con serios problemas de convivencia, el presidente del comité nacional de la UCR, Gerardo Morales, hace equilibrio entre Julio Cobos y Elisa Carrió, los dirigentes del Acuerdo Cívico y Social con mayores posibilidades de representar al radicalismo en las elecciones presidenciales de 2011.
Con el diálogo con la Casa Rosada como eje principal de la controversia, el senador jujeño pareció acercarse el jueves a las posiciones intransigentes de la líder de la Coalición Cívica con un documento que calificó de "perversa" la iniciativa del Gobierno. La mayoría del centenario partido, aún con cierta desconfianza hacia Cobos, reconoce que es el vicepresidente el mejor posicionado para que la UCR vuelva a tener chances de ser gobierno luego del traumático final de la gestión de la Alianza.
"El habla con los dos. De hecho, charló con ellos antes de emitir el documento", afirma un correligionario que conoce los pasos del senador jujeño. La interpretación de la declaración, claro está, fue diferente. Mientras el cobismo rescató que la UCR enfatizó que el diálogo "[debía] seguir siendo herramienta de consenso", como dice el documento, Carrió y sus leales manifestaron su "felicidad" porque el tono del documento les había "dado la razón" en su negativa a concurrir a la Casa Rosada.
"Quedó demostrado: no soy caprichosa ni irracional", dijo Carrió anteayer, a modo de respuesta. "Se dieron cuenta de que tenían que salir de ese lugar que los perjudicaba, como se lo dijimos", agregó a LA NACION Patricia Bullrich, diputada y una de las principales espadas de la fundadora de ARI.
En la UCR, desmienten que el documento haya tenido como objetivo reconocer a Carrió. "Lilita tiene razón en que el Gobierno nos está jodiendo. Pero el diálogo es un valor en sí mismo, aun en momentos malos como éste", dijo Morales a LA NACION.
"El Gobierno, frente al resultado electoral, aplica cronoterapia: cree que a los problemas los soluciona el paso del tiempo. Esto justifica la declaración, que no es de un dirigente, sino un pronunciamiento institucional", coincidió el dirigente porteño Jesús Rodríguez.
Además de sus cuentas pendientes con Carrió, Morales también intentará limitar al vicepresidente. El objetivo: designar a su sucesor, quien tendrá a su cargo la reconstrucción partidaria y las relaciones con sus aliados. En el comité nacional, ganan fuerza los nombres del mendocino Ernesto Sanz, el chaqueño Angel Rozas y el bonaerense Ricardo Alfonsín, en oposición al candidato de Cobos, el también mendocino Raúl Baglini.
"Poner a un ultracobista es terminar con la Coalición Cívica. Y queremos la unidad", esgrimen dirigentes cercanos a Morales para explicar el rechazo. Durante esta semana, Morales intentará avanzar en la cuestión, aunque aún Sanz -que quiere gobernar Mendoza- no se muestra convencido, y Alfonsín debería ser designado delegado al comité nacional en su distrito, pero las elecciones están previstas recién para 2010.
Con el socialismo enfrascado en la reconstrucción, luego de la derrota en Santa Fe, Morales seguirá mediando entre Carrió y Cobos. El final está abierto y 2011 parece la eternidad.
Por la unidad
Contra el Gobierno
En la UCR coinciden con Elisa Carrió en cuestionar al Gobierno por la falta de cambios luego de las rondas de diálogo auspiciadas por la Casa Rosada.
En favor del diálogo
El presidente de la UCR, Gerardo Morales, reivindicó la posición partidaria de concurrir a dialogar aun sin obtener resultados. Y se acercó a la postura dialoguista del vicepresidente Cobos.
Una conducción "resistente"
Morales piensa en Sanz, Rozas o Ricardo Alfonsín para sucederlo a partir de diciembre. Rechaza a Raúl Baglini, candidato que propone Cobos.
Hacia 2011
A pesar de la desconfianza que aún les provoca, la mayoría de los dirigentes de peso prefiere a Cobos como candidato presidencial, "aunque sin aceptar condicionamientos" por parte del cobismo
