La UCR arrancó su Convención y ya se habla de candidaturas para 2011

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Presión para que encabece la lista de la Capital en Junio

Clarin.com.ar – Nadie afuera. Todos perdonados. Es la hora de la reconciliación. En el primer día de deliberaciones de la Convención Nacional, los radicales jugaron todas las cartas: el partido encarará una etapa de reunificación y apurará negociaciones con otras fuerzas. El primer objetivo, claro, las elecciones legislativas del 28 de junio. Pero ya todos hablan del gran anhelo: volver a la Casa Rosada en 2011. "Hasta hace poco no teníamos líderes. Los radicales éramos leprosos. Pero ya no", dijo Gerardo Morales, el jefe del partido. En la tribuna estaba el catamarqueño Eduardo Brizuela del Moral, un ex radical K antes acusado de traidor y anoche aplaudido. El símbolo, se oía, de la nueva era.

Una era que ya está marcada a fuego por dos nombres: los de Julio Cobos y Elisa Carrió. La cúpula partidaria les exigirá que se metan de lleno en la campaña como paso previo a las movidas del año próximo para determinar quién se ganará el derecho a ser el candidato presidencial del espacio. Es más: Hipólito Solari Yrigoyen, antes de inaugurar la Convención, le pidió públicamente a la líder de la Coalición Cívica que baje a Alfonso Prat Gay del primer lugar de la lista de diputados por la Capital y que esté ella al frente de la nómina.

Cada uno, por ahora, hace el juego que más le conviene. El vicepresidente se quedó con las ganas de venir a Mar del Plata para volver a abrazarse con sus viejos compañeros de ruta, pero envió una carta para adherir a la nueva etapa y se cuidó de que no faltara ningún cobista. La líder de la Coalición tendrá más suerte: nadie le podrá quitar la foto del reencuentro. En su entorno dicen que anoche se preparaba convencida de que iba a ser la gran atracción. Volverá a pisar un escenario radical después de nueve años, cuando dijo adiós al partido para fundar el ARI.

Pero, ¿hay espacio para Cobos y Carrió juntos? ¿Alguno podrá resignar sus aspiraciones? Difícil. No son ingenuos los que ahora promueven, por necesidad estratégica, la convivencia. Por eso, ya empezaron a buscar mecanismos para cuando llegue la hora de decidir. Hay dos caminos. El consenso, que sólo se lograría si las encuestas no dejan lugar para dobles interpretaciones. O las urnas: muchos barajan la idea de una interna abierta, como aquella que definió la suerte de la Alianza, cuando Fernando de la Rúa derrotó a Graciela Fernández Meijide.

"Llegado el momento, habrá que hacer como dijo Alfonsín: dejar de lado la feria de vanidades y elegir. Si hace falta, haremos una interna y el que pierda tendrá que acompañar", propuso Federico Storani. "El objetivo tiene que ser el programa. Si no, vamos a cometer los errores del pasado. Cuando eso se logre yo diría que nos puede ayudar un sistema de encuestas", dijo el jefe del bloque de diputados de la UCR, Oscar Aguad.

No sin controversia, la iniciativa está en marcha. "Si no hay consenso para elegir entre Cobos y Carrió, yo me inclino por hacer internas abiertas. Que voten todos", razonó el cordobés Mario Negri. Ernesto Sanz, el jefe de la bancada de senadores, cree que "Cobos y Carrió están muy maduros y racionales. No se nos plantea ningún embudo".

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