Gesto de unidad de Cobos y De Narváez

La Nación

-¡Hola, Julio!

-¿Cómo estás, Francisco?

Con un beso en la mejilla y esas palabras, ayer el vicepresidente Julio Cobos y el diputado Francisco de Narváez se saludaron muy amigablemente en un encuentro poco casual en Tres Arroyos.

De Narváez venía de Bahía Blanca, donde se había reunido con dirigentes del PJ disidente y productores, y había embestido contra el gobernador Daniel Scioli por la ola de inseguridad. Cobos también recorría el sur bonaerense en clave de armado político (su destino final será hoy Bahía Blanca), y cuando el empresario lo supo decidió acercarse "para tomar un café y conversar", contó él mismo.

Según confiaron a LA NACION fuentes de los dos sectores, la charla duró algo más de media hora, y los temas centrales fueron el acuerdo de toda la dirigencia sobre políticas a largo plazo que los dos motorizan, haciendo un especial hincapié en el combate a la inseguridad.

Muy impactados por la muerte del bebe de Carolina Píparo, víctima de una salidera bancaria, Cobos y De Narváez hablaron del tema, hicieron públicas sus condolencias a la familia y reclamaron que el país "recupere la normalidad".

"Coincidimos con gran parte de la dirigencia política sobre la necesidad de que este país recupere la normalidad en muchos temas, tiene muchos temas estructurales que una sola gestión de gobierno no puede resolver, como por ejemplo la inseguridad", explicó Cobos.

Como publicó LA NACION hace 10 días, el vicepresidente y el empresario impulsan un acuerdo entre todas las fuerzas políticas para llegar a 2011 con una base mínima de consensos en los temas fundamentales para el desarrollo del país.

Ayer aprovecharon el café que compartieron para sumar coincidencias sobre ese tema. "Conversamos sobre las preocupaciones comunes, como una mirada de largo plazo, devolverles certezas a los ciudadanos, hablar de la educación, de la salud, de la vivienda", contó De Narváez a los periodistas que lo esperaban fuera del bar del Centro Danés de Tres Arroyos, 500 kilómetros al sur de la Capital. "Aunque no representemos el mismo espacio político tenemos una vocación de construir en la Argentina y esto es normal", agregó el empresario.

Aunque no lo mencionaron en la charla ni fuera de ella, un acuerdo de gobernabilidad para 2011 no es lo único que los une.
Sin un candidato a presidente definido en el espacio del Peronismo Federal que él integra, De Narváez nunca descartó convertirse en el postulante a gobernador bonaerense de Cobos. "El no tiene nada para postular por abajo y nosotros no tenemos nada por arriba", lo graficó a LA NACION un dirigente del PJ.

Cerca de Cobos priorizan su reconciliación con la UCR (contrarios a una alianza con De Narváez) y preferirían un acuerdo de gobernabilidad si Cobos ganara las elecciones nacionales desde la UCR, y De Narváez, la provincial desde el PJ disidente.

El resto de la charla, rodeada por los dirigentes que los acompañaban, se centró en la inseguridad y las muertes que en las últimas horas conmocionaron a la opinión pública.

"Hoy estamos todos consternados. Se ha perdido todo respeto por la vida y esto se refleja en el accionar delictivo con crímenes que nos conmocionan", dijo Cobos.

Después de su reunión con De Narváez, el vicepresidente se reunió con productores y empresarios locales y propuso una convocatoria bien amplia para combatir la inseguridad.

De Narváez, en su paso por Bahía Blanca, le había apuntado directamente al gobernador Scioli por el tema. Lo acusó de "entregar la provincia" al kirchnerismo, denunció que quiere endeudarla para hacer "más clientelismo" y lo consideró un "fracasado" en políticas de seguridad. "Scioli es Kirchner. Y el kirchnerismo usa a los bonaerenses para mantenerse en el poder… Sólo le interesan sus votos", lo criticó.