El kirchnerismo perderá las mayorías

1

En la Cámara de Diputados se quedará con 103 escaños propios; en el Senado no alcanzará el quórum para imponer sus proyectos.

La Nación – La dura derrota sufrida ayer por el oficialismo en los principales distritos electorales del país dejará al kirchnerismo sin quórum propio en ambas cámaras legislativas a partir del próximo 10 de diciembre. Se trata de un hecho inédito para un gobierno justicialista a lo largo de los más de 60 años de existencia del peronismo.

Como contrapartida, los grandes ganadores de ayer fueron los conglomerados opositores de los socios del Acuerdo Cívico y Social (UCR, Coalición Cívica y socialistas) y la unión del peronismo disidente con el Pro de Mauricio Macri.

En conjunto, todas las fuerzas de oposición controlarán la Cámara de Diputados, con más de 140 escaños, ante una representación kirchnerista que retrocederá a 103 legisladores propios más una docena de aliados.

En este escenario, la Casa Rosada estará obligada a consensuar con la oposición la sanción de cualquier proyecto. En otras palabras, a partir de diciembre próximo ya no podrá disponer de las cómodas mayorías que le han permitido convertir al Congreso en una escribanía de lujo del Poder Ejecutivo.

En el Senado, en tanto, el kirchnerismo cedió cuatro escaños. Las 36 bancas que tendrá en el próximo Congreso lo dejarán sin quórum propio, que es de 37 senadores presentes. Sin embargo, en este caso el panorama es menos complicado para la Casa Rosada, ya que el representante del Movimiento Popular Neuquino, Horacio Lores, seguirá cumpliendo las órdenes de su gobernador, Jorge Sapag, de apoyar a la administración nacional de Cristina Kirchner.

En los hechos, el kirchnerismo perdió ayer las cómodas hegemonías que tenía en ambas cámaras, por lo que tendrá que afrontar un duro trabajo de negociación para garantizar la gobernabilidad durante más de dos años y medio que le quedan de gobierno.

La principal sangría de bancas del oficialismo se registró en territorio bonaerense: el oficialismo apenas si pudo retener allí 12 de los 20 escaños que puso en juego.

También ayudó a cambiar el color de la futura Cámara baja el fuerte voto antikirchnerista en provincias como Córdoba, Santa Fe y Mendoza. Allí, sobre un total de 23 bancas, el oficialismo apenas si ganó cuatro escaños.

Pero la jornada electoral deparó sorpresas, como la derrota kirchnerista en Santa Cruz. Si bien se trató de la pérdida de una banca para la Casa Rosada, el impacto está dado por el hecho de tratarse de la provincia donde el matrimonio presidencial forjó su poder político.
El futuro Senado

Tal como se preveía, el kirchnerismo perdió cuatro bancas y quedó con un legislador por debajo del quórum de 37 presentes. Este es el número mágico que permite habilitar el debate y que le garantiza a quien lo posea la aprobación segura de un proyecto.

Uno de los grandes ganadores es el conglomerado del Acuerdo Cívico y Social, que pasará a dominar 24 legisladores, convirtiéndose así en segunda fuerza. El peronismo disidente, en tanto, será tercera fuerza, con nueve escaños.

El gran ganador individual de la jornada fue, sin dudas, el peronista disidente Carlos Reutemann. Se impuso por poco más de un punto y mantuvo con vida sus aspiraciones presidenciales al tiempo que le asestó un golpe al oficialismo provincial, encarnado en el Frente Progresista y su candidato, el socialista Rubén Giustiniani.

De todas maneras, se trató de un resultado amargo para la Casa Rosada, ya que sus candidatos quedaron fuera de toda disputa en esta provincia.

También era oscuro el panorama en Córdoba, donde el Frente Cívico de Luis Juez se impuso. La tercera banca era disputada al cierre de esta edición entre la UCR y el PJ del gobernador Juan Schiaretti, con leve ventaja para Ramón Mestre hijo, candidato del centenario partido. En este caso, tampoco hay chances para el kirchnerismo de ganar alguna banca.

Otro duro golpe para el PJ fue Corrientes. No sólo perdió dos bancas, sino que dos vertientes del radicalismo se repartieron todos los escaños en juego. También hubo derrotas oficialistas en Mendoza y Catamarca.

La única alegría para la Casa Rosada la dio Tucumán, donde el oficialismo del gobernador José Alperovich ganó una banca al alzarse con los dos escaños por la mayoría. La sorpresa aquí la dio el Acuerdo Cívico y Social, que logró colocar al tercer senador y desplazó de la Cámara alta a Fuerza Republicana, el partido fundado por Antonio Bussi.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *