El Gobierno dice que deja las sillas vacías

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Aunque el campo anunció para el lunes el fin del paro, la Casa Rosada dijo que regresará a la negociación cuando no haya ningún tipo de protesta. Enojo con el defensor del Pueblo.

CríticaDigital.com.ar – A pesar de que el campo informó que levantará el paro el lunes, el Gobierno confirmó ayer que no negociará nada concreto en el corto plazo con las autoridades del agro. Desde la Casa Rosada se rechazó, aunque de manera informal, la invitación del defensor del Pueblo, Eduardo Mondino, que había convocado para el lunes a la tarde a una reunión entre el oficialismo y la mesa de enlace agropecuaria.

“Mondino no es la contraparte de nada. Que no se peine para esta foto. Lo que hizo es inconducente. Más allá de que se levante el paro, cómo vamos a negociar con gente al costado de la ruta y bajo amenaza de cortes”, señaló a Crítica de la Argentina un funcionario de buena llegada a Cristina y Néstor Kirchner.

En el documento que difundieron ayer, los ruralistas informaron que aceptaban la invitación de Mondino “en cumplimiento de nuestra obligación cívica y, fundamentalmente, en la búsqueda permanente del diálogo y las respuestas que los productores y la sociedad requieren”.

El oficialismo, en cambio, no acepta mediadores para dirimir la crisis –ni a Mondino ni menos a la Iglesia– y continúa firme en su estrategia: dilatar cualquier diálogo con sus “adversarios” con el objeto de desgastar su fuerza política.

“Que levanten el paro no significa que el lunes nos tenemos que sentar a hablar, y menos que menos que tenemos que llevarles una oferta concreta. El país primero tiene que normalizarse”, analizó un funcionario con despacho en el primer piso de la Casa Rosada.

Alberto Fernández, el jefe de Gabinete, principal negociador con el campo, nunca reconoció a Mondino como interlocutor válido: “La mediación supone dos partes en conflicto, y no somos dos partes en conflicto”, repite.

El ministro de Justicia y Seguridad, Aníbal Fernández, también se encargó de dejar en claro que la Iglesia no puede mediar y que se equivocó al pedirle “un gesto” al oficialismo: “Que le pidan un gesto de grandeza me suena casi hasta irrespetuoso porque quienes lo están pidiendo debieran estar asociados a esta idea, la idea de pelear por la mesa de los argentinos, asegurarles que productos, como el pan, valgan lo que están valiendo hoy, no cinco veces más”.

El matrimonio Kirchner reacomodó en las últimas horas su estrategia respecto a la protesta del campo. Quiere bajar el nivel de exposición del Gobierno. La idea es correrse del escenario de la confrontación lo máximo posible e instalar la sensación en la opinión pública que los ruralistas son los únicos intrasigentes y que, a partir de ahora, deberán hacerse cargo de los problemas generados por el clima de protesta nacional.

El ex presidente Kirchner bajó línea anteayer frente al plenario del Partido Justicialista: “Ahora, ellos (por los ruralistas) se tienen que hacer cargo de lo que pase”, dijo, según contó el diario La Nación.

El nuevo plan oficial ya tiene gestos visibles. Ni la Prefectura ni la Gendarmería custodian las rutas con una presencia contundente, como ocurría hasta hace pocos días. La maquinaria oficialista, además, difunde las novedades que ayudan a fortalecer la nueva estrategia.

La Presidenta encabezó ayer un acto con cinco gobernadores, ministros y empresarios para anunciar que se liberan las exportaciones de carne de vaca conserva. E informó que el martes próximo recibirá a Hermes Binner, el gobernador de Santa Fe, quien le había pedido una audiencia para tratar la crisis agraria. O sea: el Gobierno se muestra gestionando para un sector agrario y dialoguista con un gobernador opositor.

En la Casa Rosada, además, se celebró la imagen de varios camiones cordobeses derramando miles de litros de leche. Los operadores oficiales creen que esa foto es negativa para las autoridades del campo. Y siguen metiendo presión a su modo: impulsaron las declaraciones de varios gremios del sector agroalimentario, que alertaron sobre los riesgos que corren los trabajadores del sector por el paro: “Existe el peligro de que además queden al margen de la seguridad social por la caída de los aportes luego de casi tres meses sin actividad”. Estos sindicatos se encargaron de aclarar que querían que sea Cristina Kirchner quien “arbitre lo medios” para encontrar una solución.

La Casa Rosada, por ahora, sigue creyendo que la salida se encontrará sólo cuando el tiempo pase y los ruralistas cedan en sus discursos y pedidos.

Binner se reúne con Cristina

Cristina Fernández dijo “sí” y se agendó un encuentro con el gobernador de Santa Fe. La Presidenta accedió ayer al pedido de “audiencia urgente” que le realizó Hermes Binner el día anterior y lo recibirá el próximo martes en la Casa Rosada.

El gobernador santafesino le informará a la mandataria sobre la situación que atraviesa su provincia, una de las más afectadas por el conflicto, y le pedirá que reinicie las conversaciones con los ruralistas.

Binner llevará su propuesta de crear un Consejo Nacional Agropecuario ampliado para facilitar un acuerdo. “Pero no pretende convertirse en mediador”, advirtieron desde su entorno. Desde la Presidencia de la Nación confirmaron que el único tema del encuentro será el conflicto agropecuario.

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