Bergoglio pidió más honestidad al Gobierno

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Al finalizar una de las procesiones más organizadas y festivas de los últimos años, el cardenal rogó por “tantos descartados que tienen nombre”. Los veteranos de Malvinas hicieron un acto.

Crítica de la Argentina – Ayer se realizó la 35ª peregrinación a la Basílica de Luján. Más de 1.300.000 personas marcharon –algunas a paso firme y otras más rezagadas–, cada una con diferentes objetivos: pedir, agradecer o simplemente demostrar la devoción que sienten por la patrona de la Argentina. Según estimaciones de la Policía de la Provincia de Buenos Aires, la multitud congregada fue récord. La caminata anual de este año se realizó bajo el lema: “Madre, que tu mirada renueve nuestra esperanza” y como es tradición, los creyentes recorrieron a pie los 58 kilómetros que hay entre la iglesia de San Cayetano, ubicada en el barrio porteño de Liniers, y la Basílica de Luján. Para dar fin a la procesión cristiana, los fieles participaron ayer de la misa oficiada por el cardenal Jorge Bergoglio en la plaza Belgrano frente a la basílica. En su homilía, el cardenal le rogó a la Virgen de Luján que ayude a “tantos descartados, que tienen nombre” y dijo que la Iglesia Católica “mira a todos sin distinción y que se viene ocupando desde hace mucho tiempo de los hermanos más pobres, esos hijos que en las sumas y restas de los cálculos han quedado al borde del camino, los hijos del descarte”, declaró Bergoglio. De esta forma, salió a responder los cuestionamientos de la presidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien había manifestado que hay quienes “hablan de las desigualdades sociales pero no hacen nada para resolverla”. El cardenal reafirmó así su llamado a combatir la pobreza, que según la Iglesia afecta a cerca del 40% de la población, un porcentaje muy superior al 13,9% que sostienen las estadísticas del Estado.

Una de las más alegres. Los fieles aseguraron que fue una de las peregrinaciones más alegres de los últimos años y una de las mejores organizadas. Hubo mucha más presencia de parroquias que llevaron a sus respectivos fieles, así como también más control policial con la participación de la mayoría de las municipalidades. La procesión resultó toda una fiesta. La música sonaba por doquier. Banderas y cánticos esperanzadores inundaban cada rincón de la ciudad de Luján. Leandro Quattrocchi tiene 25 años y pertenece a la Parroquia Luján de los patriotas. Hace ocho años que se une a la peregrinación, cuatro años lo hizo en la escuadra de apoyo a los caminantes y los últimos cuatro a pie. “Cuando faltaban dos kilómetros y medio sentí que no podía seguir. Tenía los pies como dos empanadas. Pero una vez adentro de la basílica se me fueron todos los dolores”, dice Leandro, y asegura que la caminata representa un “sacrificio de fe” y “agradecimiento”. Él, como muchos otros, pensó en abandonar la marcha en varias oportunidades, pero finalmente llegó y cuenta: “Me crucé con gente que marchaba con muletas o en sillas de ruedas y eso me dio más fuerzas para seguir”.

A las 6.35, los peregrinos recibieron la “imagen cabecera” de la Virgen que había partido el sábado desde el santuario de San Cayetano. Minutos antes también llegó la imagen de la Virgen que familiares de los caídos en la guerra de 1982 colocarán el 10 de octubre en el cenotafio inaugurado el sábado, por el primer contingente, en el cementerio de Darwin de las islas Malvinas.

En la Plaza de los Escudos, a pocos metros de la basílica, los veteranos de guerra hicieron un acto alusivo y rezaron un Rosario y el Padrenuestro. La mayoría de los caminantes se ubicó delante del altar levantado frente a la basílica. Allí, muchos se enteraron del fallecimiento de Mercedes Sosa, y un grupo de sacerdotes ofreció una oración por el eterno descanso de la cantante popular.

Los fieles no olvidaron comprar los respectivos souvenirs que se vendieron en los cientos de puestos callejeros que rodean el templo. Además, la gran mayoría hizo largas colas para conseguir “el certificado de peregrino”, una constancia de que la persona hizo el trayecto entre Liniers y Luján.

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